A pesar de debatirse entre la vida y la muerte, el senador Miguel Uribe Turbay lidera la carrera presidencial. Así lo confirma la más reciente encuesta de Guarumo y EcoAnalítica, divulgada este lunes, justo cuando se cumple un mes del atentado que casi le arrebata la vida. Con un 13,7 % de intención de voto, Uribe encabeza la medición general, por encima de figuras como Vicky Dávila (11,5 %) y Gustavo Bolívar (10,5 %), y se consolida como la carta más fuerte del Centro Democrático.
El resultado del sondeo, realizado entre 2.122 personas y con un margen de error del 2,2 %, refleja un respaldo significativo a su figura, incluso en medio de su ausencia del escenario público y político. Dentro de su partido, el liderazgo es aún más contundente: con un 74,4 %, Miguel Uribe supera ampliamente a otros precandidatos como María Fernanda Cabal (11,4 %) y Paloma Valencia (6,9 %).
Uribe, de 39 años, recibió tres impactos de bala dos en la cabeza y uno en la pierna el pasado 7 de junio, mientras hablaba ante sus seguidores en Modelia, occidente de Bogotá. Desde entonces, permanece en estado crítico en la Unidad de Cuidados Intensivos de la Fundación Santa Fe, donde ha sido sometido a múltiples cirugías por lesiones intracraneales complejas. Su pronóstico neurológico continúa siendo reservado.
El ataque fue perpetrado por un joven de 15 años, Juan Sebastián Rodríguez, capturado en el lugar de los hechos. Durante su aprehensión, reveló el nombre del presunto autor intelectual: Elder José Arteaga Hernández, alias “El Costeño”, capturado semanas después. Con él, ya son cinco los detenidos por el atentado. Las autoridades aseguran que el crimen habría sido planeado a cambio de \$1.000 millones y han involucrado a más de 180 agentes en una investigación que contó con cooperación internacional.
Mientras el país sigue pendiente de los partes médicos y los avances judiciales, ha sido María Claudia Tarazona, esposa de Miguel Uribe, quien ha mantenido viva la llama de la esperanza. A través de emotivos mensajes ha narrado el impacto emocional del atentado en su familia. Este 6 de julio, durante la Carrera por la Vida organizada en más de 20 ciudades, compartió una foto con Miguel tomada antes del ataque:
“Todos los días pienso en ti, en las noches rezo por tu salud y te visualizo así, feliz, corriendo. Esta carrera es también por ti y por todos los héroes que han dado su vida por Colombia”.
Miguel Uribe hoy no habla, no da entrevistas, no aparece en tarimas ni debates. Sin embargo, lidera la intención de voto en Colombia. Su caso se ha convertido en una paradoja dolorosa: el país lo apoya más que nunca, mientras él libra en silencio la batalla más dura de su vida.
Las investigaciones continúan, su estado de salud sigue siendo delicado y las preguntas de fondo aún no tienen respuesta. Pero el respaldo ciudadano, expresado tanto en las calles como en las encuestas, sugiere que, aun desde una cama de hospital, Miguel Uribe sigue teniendo un papel central en el destino político de Colombia.

